Con todo el aforo vendido antes de su apertura de puertas
(61000 ENTRADAS), el decano de los Festivales cumplía una
edición más en la que el público ha sido el gran protagonista.
Por su lealtad al evento año tras año hasta llegar a colgar el
cartel de "no hay entradas" y por entregarse con todos los
artistas participantes.
En estos tiempos en que es tan difícil convocar público para todos
los que participamos en la música, este VIÑAROCK quedará
como un rayo de esperanza ante la tormenta a la que nos
enfrentamos con el quehacer diario.
Enhorabuena al público asistente por el apoyo a la música actual.
Un arte que, aunque unos pocos quieren apagar, seguirá
perdurando en el tiempo.
Fuente: Calle Underground
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