miércoles, 4 de mayo de 2022

Presentación disco MALENA Y BELCEBÚ "Destrucción". Madrid, jueves 5 de mayo

 

CASI CUARENTA AÑOS DESPUÉS, EL ÁLBUM PERDIDO DE MALENA Y BELCEBÚ («DESTRUCCIÓN») CIERRA EL CÍRCULO DEL HEAVY METAL ESPAÑOL

El próximo jueves 5 de mayo se presenta en el madrileño bar musical Wild Thing el disco de esta fugaz formación madrileña, cuyos temas junto a la vocalista Shelly quedaron sumidos en el olvido hasta su milagrosa recuperación. En plena época digital, estas cosas "analógicas" todavía ocurren y hay que celebrarlo por todo lo alto...  

Han sido dos largos años de gestiones en torno a la recuperación de las canciones inéditas de Malena y Belcebú, pero finalmente el sueño se ha hecho realidad y ya tenemos entre manos la pieza que faltaba para completar el puzzle del Heavy Metal nacional. Antes de que “los heavies” reinaran en los institutos, los primeros años de la década de los ochenta fueron los del público y los artistas pioneros, gente realmente dura que aguantó la avalancha de la Nueva Ola y supo defender su identidad con absoluta fe en ese nuevo sonido.

En este contexto es donde encajan estas grabaciones del grupo Heavy de la vocalista María de la Concepción Gutiérrez Lobo, la antigua Shelly de finales de los años 60. Dos de las canciones ya las conocíamos por su inclusión en el recopilatorio “Unidos por el Rock”, publicado por Discos Victoria en aquel mismo 1983: “Hola hermano” y el ya popular “Destrucción”, un ejemplo perfecto de Metal agresivo y a la yugular, rápido y contundente. Este LP de edición única en vinilo que ahora ve la luz comienza con este auténtico clásico “oculto”, que poco a poco va ganando su sito en la historia gracias a la inclusión de Shelly en el documental “Ellas son Eléctricas”.

Malena era Shelly y Belcebú eran los guitarristas Antonio Abanades y José Antonio Ortiz, el bajista Vicente Lauder y el batería Pedro Valle. Ninguno de ellos era un recién llegado. De hecho, en el currículo de aquellos músicos y algunos otros posteriores que pasarían por la formación destacaban los créditos de bandas como Caña, Mazo o los argentinos V8. La cantante, por su parte, había irrumpido en 1968 en el panorama de la música joven española, donde su excelente dominio del inglés y la imagen cosmopolita que lucía ayudaron a crear una figura carismática. El hecho de que durante casi 50 años no se supiera nada de su destino artístico y personal convirtió a la madrileña en un pequeño mito entre el modernismo y los amantes del Soul local.

En aquella primera etapa sus particulares Belcebú fueron Nueva Generación, conjunto de músicos notables que pronto derivarían en proyectos de gran calado y corte progresivo. Todo esto y mucho más se cuenta en las nada menos que 16 páginas de texto e imágenes que ilustran las composiciones de la banda. Algunos de los recortes y datos que ofrece el investigador Paco Manjón valen su peso en oro y son fruto de una concienzuda indagación.

Shelly sus compañeros registraron un total de siete canciones, cinco de las cuales han permanecido en un cajón durante casi cuarenta años: “Ella es siempre feliz”, “Te tienen atrapado”, “Cuando llueva en tus ojos” y “Escápate”. La posibilidad de poder escuchar a la primera vocalista femenina que grabó Rock Duro en España es un testimonio histórico de tremendo valor, por cuanto pone en contexto la posterior aparición de otras cantantes como la referencial Azucena.

Los gritos, guturales y bruscos cambios de registro de Shelly desconciertan por la enorme vehemencia de su interpretación, que lleva las canciones a una nueva dimensión de los que por entonces se consideraba la música dura en España. Shelly sólo se relaja en el medio tiempo “Cuando llueva en tus ojos”, una balada en la que deja entrever su dominio de otros territorios vocales más melódicos y de un cierto dramatismo actoral.

Un tema como “Escápate” se convierte por derecho propio en una de las canciones fundamentales del mejor Rock Duro urgente y sin ambages hecho jamás en este país. Se trata de un ejemplo perfecto del puente entre las texturas sonoras de finales de los años 70 y un natural endurecimiento en sus estructuras de estribillos y solos de guitarra. La desesperación se mezcla con el desahogo y ambas sensaciones vuelcan su rabia en una letra evasiva que es pura poesía urbana. Si este tema lo cantase “El Chino” en el primer disco de Banzai, a nadie le extrañaría. Y si la letra la hubiera escrito Xaime Noguerol, menos aún.

“Destrucción” ha sido editado por Beat Generation y cuenta con la distribución de Munsterama y la colaboración de los sellos gestores Gadir Records y Héroes de Culto. Se encuentra disponible en su versión digital en el Bandcamp de Munster Records desde el pasado 2 de febrero y quienes prefieran el fetiche de lo físico lo localizarán con facilidad en las tiendas especializadas en vinilo.

Coloquen “Destrucción” junto a los primeros discos de Barón Rojo, Obús, Mazo y Pánzer y entenderán perfectamente lo que fueron aquellos tres primeros años de la década para ese otro tipo de música popular con la que de inmediato se identificó una buena parte de la juventud española.

No hay comentarios:

Publicar un comentario