foto de Clara G. Photo |
Álex tuvo un momento estelar y de altísimo virtuosismo
técnico en un transgresor solo de batería de varios minutos de duración, en los
que removió emociones y pulsos de los asistentes, que ovacionaron con fervor al
terminar.
La relevancia del acto va más allá de su increíble aportación
a la formación en lo técnico y la conexión con sus compañeros (cosa que quedó
bien clara en dicho directo) y salpica La Escena al completo, pues Álex mostró
a sus compañeros y el apasionado público de la banda, que ha llegado como uno
más a un proyecto, que como muchos por desgracia, se sostiene pendido casi de
un hilo de romanticismo y esfuerzo titánico como casi todas las bandas de Metal
Español por sonar más allá de sus zonas de confort y de sus oídos afines.
El mensaje de todo esto, en un momento convulso, en el que
día sí día también se escinden bandas o se caen integrantes, ya sea por
dificultades personales derivadas de la situación social global o diferencias
de enfoque en los proyectos, es que en un concierto, se ha puesto en relieve,
que con paciencia se siguen encontrando músicos dispuestos a colgarse con otros
en la ilusión romántica del trabajo por una música que en nuestro país no da de
comer y únicamente tiene un beneficio emocional si se consigue una buena
cohesión de trabajo y comunicación entre integrantes.
Ignis Anima rezuma esa cohesión en cada directo y necesitaba
encontrar un perfil como el de Álex, tanto por nivel técnico como personal. La
banda, además, está a la espera de entrar en estudio para grabar su próximo
disco; los temas ya maquetados y madurados durante la ralentización pandémica y
su halo de cambio dinámico en el consumo de conciertos en directo y
posibilidades de entrar en carteles de festivales.
A las bandas se les pide ahora flexibilidad, pero realmente,
no se ha conocido otra cosa que esa resiliencia en éste estilo desde
siempre.
La reflexión es positiva cuando se presentan conciertos con
la energía arriba y abajo de las tablas como el del pasado 1 de Abril y un
joven batería entra como un cañón en una banda, que si tiene algo es cercanía y
gran conexión entre sus miembros y público... ¿Románticos y locos testarudos
por seguir luchando por una banda como miles?, Sí, pero el caché emocional de
lo que hacen éste tipo de bandas es inmenso y global, arriba y abajo del escenario,
porque es directo, humilde, sencillo y encima de gran calidad.
No hay más que ver que los medios que cubrís,
subsistís del mismo romanticismo, los fotógrafos hacen trabajos
maravillosos y las bandas nunca podremos agradecer ese apoyo lo suficiente.
También hay buenas noticias de bandas que crecen y es
importante para las nuevas generaciones
Esperamos, y creemos desde luego, que Álex será una buena noticia para el futuro de la banda y del álbum que está por venir, porque es joven, muy exigente, trabajador, creativo y participativo, además de una fuerza y sensibilidad especiales en lo musical.
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